Ceniza de la chimenea: cómo aprovecharla

Las cenizas de la chimenea son un componente natural con un gran potencial para el cuidado del hogar. Estos restos de la combustión de la leña son ricos en minerales y sílice, y se pueden usar para una amplia variedad de usos.

Desde limpiacristales hasta antiplagas, pasando por desodorantes ambientales, repelentes de insectos o fertilizantes naturales para jardines y huertos, las cenizas de la chimenea son un recurso versátil y ecológico. En este artículo explicaremos 10 formas diferentes de aprovechar las cenizas de la chimenea.

Diez formas de aprovechar las cenizas de la chimenea

Desengrasante natural

Las cenizas contienen sílice, un mineral abrasivo que se puede usar para eliminar residuos de grasa y suciedad en superficies como vitrocerámicas, acero inoxidable o encimeras. Para ello, basta con mezclar las cenizas con un poco de agua para crear una pasta espesa y aplicarla sobre la superficie. Finalmente, se retira con un paño húmedo y se seca con otro paño limpio.

Limpiacristales y quitamanchas

La sílice contenida en las cenizas también es útil para limpiar vidrios y cristales sin rayarlos. Para ello, hay que mezclar las cenizas con agua para crear una pasta espesa y aplicarla sobre la superficie con un paño húmedo.

Se deja actuar durante unos minutos y luego se retira con un trapo seco. Asimismo, también se puede usar para eliminar manchas en muebles o tejidos, siempre previamente probando en una parte no visible del tejido para comprobar que no dañe el color.

Fabricación de jabón casero

Las cenizas también se pueden usar para fabricar jabones caseros a partir de aceite vegetal usado (aceite de cocina). Esto se consigue añadiendo al aceite calentado dos partes de ceniza por una parte de aceite, removiendo durante algunos minutos hasta obtener una pasta homogénea y luego colándola en moldes previamente preparados con aceite vegetal virgen. Una vez endurecido el jabón, se retira del molde y se deja secar durante varias semanas antes de utilizarse.

Desodorante ambiental

Las cenizas tienen propiedades absorbentes que permiten eliminar los malos olores del ambiente. Para ello, hay que colocarlas en recipientes abiertos como fuentes o platos pequeños y colocarlos en los espacios donde queremos eliminar los olores desagradables. También puedes reducir el olor de tus mascotas aplicando un poco de ceniza en su pelaje y depositándola en su caseta.

Repelente de insectos

Las cenizas también pueden servir como repelente natural para insectos como mosquitos o cucarachas. Para ello, basta con esparcir la ceniza alrededor de la casa o en los lugares donde están presentes estos insectos.

Humidificador natural

Las cenizas también pueden ser usadas como humidificador natural para ambientes interiores muy secos o desecados por el calor artificial. Para ello, hay que llenar un recipiente con agua caliente y añadir algunas cucharadas de ceniza, removiendo bien hasta obtener un líquido homogéneo que se colocará en los espacios donde queremos obtener un mayor grado de humedad ambiental.

Antiplagas

Las cenizas contienen sustancias que actúan como repelentes naturales para insectos que pueden representar una amenaza para huertos o jardines, como, por ejemplo, las babosas, las cucarachas, las pulgas o los ratones. Para ello, hay que esparcir la ceniza alrededor de los sitios donde estén presentes estos insectos indeseados, evitando así su proliferación en el entorno doméstico.

Cenizas como repelentes de insectos
Cenizas como repelentes de insectos

Desatascador para tuberías

Las cenizas también sirven como desatascador natural para tuberías obstruidas por residuos sólidos como pelusas o pelo humano u animal acumulado en el interior del tubo por el paso del agua residual. Para ello, hay que mezclar bien dos partes de agua por una parte de ceniza hasta obtener un líquido homogéneo que se verterá por el tubo obstruido para desatascarlo sin necesidad de usar químicos agresivos para el medio ambiente ni el equipamiento doméstico sanitario.

Detergente

Las cenizas también pueden ser empleadas como detergente natural para lavandería o limpieza doméstica general gracias a sus propiedades abrasivas y desincrustantes que permiten eliminar manchas rebeldes sin dañar los tejidos ni la superficie en la que se encuentra la mancha.

Para ello, hay que mezclar dos partes de agua por una parte de ceniza hasta obtener un líquido homogéneo y aplicarlo directamente sobre la mancha con ayuda de un paño limpio mojado previamente en el líquido resultante.

Fertilizante para jardines y huertos

Las cenizas también son útiles como fertilizante natural para jardines o huertos debido a su alto contenido en minerales como nitrógeno, fósforo y potasio, que estimulan el crecimiento saludable de plantaciones alimentarias y florales sin necesidad de utilizar químicos perjudiciales para el medio ambiente ni indumentaria de protección.

Ceniza como fertilizante
Ceniza como fertilizante

Conclusión

Como hemos visto, las cenizas de la chimenea son un recurso polivalente con muchísimas posibilidades. Por ello, es muy recomendable que no te deshagas de todas las cenizas que produzca tu chimenea, ya que podrás darle diversos usos muy beneficiosos a nivel doméstico y ahorrar dinero en la compra de ciertos productos de limpieza.