Los deshollinadores químicos son productos químicos usados para limpiar las chimeneas y los conductos de calefacción. Estos productos se venden como la solución para eliminar los residuos y la suciedad que se acumulan en los conductos, pero la realidad es que, además de no ser efectivos para eliminar el hollín, también pueden ser muy peligrosos si no se usan correctamente.
En este artículo vamos a discutir cómo funcionan los deshollinadores químicos, por qué son peligrosos y cómo se pueden evitar estos riesgos.
Cómo funciona un deshollinador químico
Los deshollinadores químicos funcionan liberando productos químicos específicos en el conducto o chimenea para disolver la suciedad y los restos de combustible acumulado.
Estas sustancias químicas actúan como solventes, descomponiendo la suciedad y haciendo que, al menos supuestamente, la chimenea o estufa sea más fácil de limpiar.
Los deshollinadores químicos contienen una mezcla de químicos, algunos de ellos ácidos fuertes, que reaccionan con la creosota y otros depósitos de hollín para disolverlos.
Aunque se denominan deshollinadores, en realidad lo que hacen estos productos es cambiar el estado del hollín. Tras encender el producto tal y como indica en las instrucciones, la creosota del conducto se descompone y el hollín pasa de tener una textura similar a la de la sal a tener una textura harinosa.
Los deshollinadores químicos pueden tener varios formatos, desde pastillas y cartuchos hasta leños o sobres.
¿Por qué son peligrosos los deshollinadores químicos?
Aunque los deshollinadores químicos pueden ser útiles para limpiar los conductos, también pueden ser muy peligrosos si no se usan correctamente. Esto se debe principalmente a dos razones: primero, los productos químicos usados en los deshollinadores pueden ser tóxicos si se inhalan o entran en contacto con la piel.
Segundo, si los productos químicos se usan incorrectamente o en exceso, pueden provocar una combustión excesiva en el conducto o chimenea, lo que puede resultar en un incendio o una explosión.
Por estas razones, es importante tomar las precauciones necesarias al usar deshollinadores químicos. Siempre hay que seguir las instrucciones del fabricante al usar estas sustancias químicas para garantizar que se use de forma adecuada y no correr ningún riesgo innecesario.
Principales riesgos de los deshollinadores químicos
Inhalación de vapores tóxicos
Las sustancias químicas presentes en los deshollinadores químicos pueden emitir vapores tóxicos al aplicarse. Esto puede ser muy perjudicial si se inhalan accidentalmente.
Por esta razón, es importante asegurarse de tener una buena ventilación cuando se usan deshollinadores químicos. Si los vapores tóxicos se inhalan, pueden provocar problemas respiratorios como tos, irritación de la garganta y dificultad para respirar.
Es muy importante, por tanto, usar un equipo de protección personal cuando se usan deshollinadores químicos para evitar los efectos nocivos del producto.
Son altamente inflamables
El uso de estos productos supone un elevado riesgo de que se produzca un incendio en el interior de la chimenea, lo cual puede ser muy peligroso para la vivienda o incluso para la integridad física de las personas.
Además, el daño producido por estos incendios obliga a renovar y reparar por completo la chimenea, con los costes económicos que ello implica.
Problemas con la combustión
Estas sustancias químicas también pueden interferir con el proceso de combustión si no se aplican con cierto cuidado. Esto puede reducir la eficiencia del sistema de calefacción y provocar humo adicional, lo que puede ser perjudicial para la salud.
Por esta y otras razones, el uso de estos productos debe ser realizado únicamente por profesionales que se dediquen a la limpieza de chimeneas.
Son dañinos para el medio ambiente
Los deshollinadores químicos también pueden ocasionar daños al medio ambiente si son liberados de forma accidental al agua o al suelo. Por esta razón, es importante asegurarse de arrojarlos y emplearlos de forma cuidadosa.
Dificulta las acciones de limpieza posterior
En teoría, los deshollinadores químicos eliminan el hollín, pero la realidad es que lo único que consiguen es su combustión y transformación química. Es por ello por lo que, en vez de limpiar la chimenea, estufa o caldera, convierten el hollín grueso, que es más fácil de retirar, en un polvo denso y pegajoso mucho más complicado de remover y que además es muy tóxico. Este polvo se adhiere a las paredes de los conductos y dificulta enormemente la limpieza manual con deshollinadores mecánicos.
Alternativa segura a los deshollinadores químicos: los deshollinadores mecánicos o manuales
Una alternativa más segura a los deshollinadores químicos son los deshollinadores mecánicos o manuales. Estas herramientas consisten en un cabezal con un mango que se inserta en el conducto para eliminar la suciedad y la ceniza acumulada.
Estas herramientas son mucho más seguras que los deshollinadores químicos, ya que no implican el uso de productos químicos peligrosos y permiten una limpieza mucho más profunda de las chimeneas y conductos.
Además, estas herramientas son relativamente baratas y fáciles de usar, por lo que son una excelente opción para aquellas personas que buscan una forma segura de limpiar sus chimeneas y conductos.
Conclusión
En conclusión, los deshollinadores químicos son productos útiles para limpiar las chimeneas y conductos de calefacción, pero también pueden ser muy peligrosos para un usuario no profesional.
Por lo tanto, es importantísimo tomar las precauciones necesarias al usar estas sustancias químicas para evitar cualquier daño innecesario.
Yendo más allá, los deshollinadores químicos no deben reemplazar en ningún caso a un servicio profesional de limpieza, ya que no son eficaces para eliminar el hollín y tampoco son efectivos para retirar otros residuos que puedan generarse.
En cualquier caso, la mejor alternativa para los propietarios de chimeneas que quieren evitar cualquier riesgo es utilizar un deshollinador mecánico o manual, a través del cual se puede realizar una limpieza profunda sin el riesgo asociado a los productos químicos.
No obstante, nuestra recomendación es que evites cualquier riesgo innecesario. Confía en profesionales de la limpieza de chimeneas, como Tu Deshollinador. Nuestro servicio está contrastado por nuestros clientes; puedes revisar nuestra ficha de Google My Business y comprobarlo por ti mismo.
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