Cómo evitar que el humo de chimenea entre en casa

La chimenea es un elemento decorativo y técnico con el que se puede calentar una estancia, abasteciendo a los usuarios de un ambiente cálido y acogedor. Aunque el humo de la chimenea en pequeñas cantidades puede proporcionar un olor agradable, en ocasiones puede ser muy molesto si se propaga por toda la casa. Si no se toman las precauciones adecuadas, el humo puede llegar a ser insoportable o hasta peligroso para la salud. Por ello, es importante conocer las principales recomendaciones para evitar la propagación de humo de la chimenea al resto de la casa.

Seis consejos para que el humo de la chimenea no se extienda por la casa

Deshollinar la chimenea para prevenir obstrucciones

La primera medida preventiva que se debe tomar para impedir que el humo salga de la chimenea al resto de la casa es deshollinarla y limpiarla. Esto significa retirar toda la suciedad acumulada en su interior, como ceniza, hollín y otros residuos. Estas partículas pueden provocar obstrucciones en el interior, lo que dificulta que se produzca el tiraje necesario para que el humo circule con normalidad a través del conducto de la chimenea. Es en estos casos cuando el humo se “ve obligado” a salir por otro lugar, esparciéndose por la vivienda.

Se recomienda deshollinar y limpiar la chimenea a fondo al menos una o dos veces al año para asegurarse de que se mantenga limpia y libre de obstrucciones. Lo más recomendable es contactar con un profesional especializado, como Tu Deshollinador, que se encargue de ello, ya que no es una tarea sencilla.

Trabajando seguro en Tu Deshollinador
Trabajando seguro en Tu Deshollinador

Encender el fuego poco a poco

Para evitar que el humo salga de la chimenea al resto de la casa, es importante encender el fuego lentamente y con cuidado. Esto ayudará a crear el tiro adecuado entre el interior y el exterior, impidiendo que el humo se propague por toda la casa. Es recomendable empezar con leña pequeña para encender el fuego y después añadir más troncos progresivamente hasta obtener un fuego constante que irradie suficiente calor.

Enciende fuegos pequeños y vivos
Enciende fuegos pequeños y vivos

Utilizar leña seca

La leña seca es muchísimo mejor como combustible para chimenea que la leña húmeda o mojada. Esto se debe a que la leña seca arde con mayor facilidad, es más eficiente y produce menos humo al quemarse.

No utilizar madera tratada o conglomerados

La madera tratada o los conglomerados no son buenos combustibles para quemar en el interior de una vivienda, ya que producen gases tóxicos al quemarse, así como humos muy densos que pueden ser nocivos para la salud. Por lo tanto, es mejor utilizar solo leña natural para evitar estas situaciones indeseables.

No arrojar desperdicios, basura u otros materiales a la chimenea

Muchas personas suelen arrojar desperdicios o basura a la chimenea creyendo que ayudará a encender mejor el fuego o simplemente como una forma de deshacerse de los residuos.

Esto es peligroso por la posibilidad de que se descontrole la llama o salten pequeñas trizas encendidas que pueden provocar un incendio. Además, puede contribuir a obstruir las tuberías de la chimenea, provocando que el humo se desplace hacia la casa en vez de hacia el exterior.

Asegurar la circulación de aire abriendo las ventanas

Otra forma efectiva de prevenir que el humo salga de la chimenea hacia las estancias es abrir las ventanas cercanas al fuego durante su encendido para permitir un flujo adecuado entre el interior y el exterior del hogar. Esto ayudará a que se genere el tiro óptimo para que el humo circule hacia arriba.

Una buena circulación del aire evitará que el humo entre a casa
Una buena circulación del aire evitará que el humo entre a casa

Utilizar un dispositivo de extracción de humo

Existen dispositivos extractores que recogen los gases tóxicos producidos por el fuego para expulsarlos al exterior de forma más eficaz. Estos sistemas son relativamente baratos y fáciles de instalar y son muy útiles para solucionar problemas de humos.

Utilizar una puerta de fuego hermética

Otra cosa que se puede hacer para evitar la presencia de humo en el hogar es instalar un sistema hermético para cerrar la chimenea.

Puerta para cerrar chimenea
Puerta para cerrar chimenea

Hay varios tipos de puertas con las que se puede sellar la chimenea para prevenir que los gases tóxicos producidos por los fuegos se dispensen por la casa. Estas puertas son generalmente fabricadas con materiales como vidrio o acero inoxidable resistentes al calor. Además, suelen contener selladores especiales que garantizan que los gases de la chimenea no se escapen hacia las habitaciones.

Conclusiones finales

Esperamos haberte ayudado a evitar que el humo aparezca en zonas no deseadas de la casa. Recuerda que la limpieza de la chimenea es un aspecto muy importante para la seguridad y comodidad de tu hogar, por lo que te recomendamos que este trabajo lo haga un profesional.

En Tu Deshollinador nos encargamos de la limpieza de chimeneas, tanto en Murcia, como en Alicante. Contacta con nosotros y pide presupuesto sin compromiso.